HomestoryCRÓNICA: Superación en el Challenge de Samorín

CRÓNICA: Superación en el Challenge de Samorín

Por fin llegaba a Eslovaquia el miércoles, para disputar el Campeonato del mundo Challenge de media distancia que se había ido posponiendo por culpa de esta maldita pandemia.

En los días previos a la prueba el tiempo está siendo inestable, mucho viento, lluvia, pienso que como vaya a ser así nos espera un día probablemente más duro si cabe.

He venido a la prueba con @correlibre. Nos acercamos al X bionic Sphere, para ver dónde se competirá y poder hacer uso de las instalaciones, ya que ese día teníamos que activar el cuerpo después del viaje del día anterior. El sitio es espectacular.

Por fin llega el Domingo. El día amanece con alguna nube, pero no tiene pinta de que vaya a llover, eso si, hace muchísimo viento. La salida en la natación es a las 9:30, saldremos en grupos de tres cada 5”, las aguas del Danubio muy frías, y con mucho oleaje, el viento que hace lo provoca.

Primeras brazadas duras, mucho frío y corriente en contra, al cuerpo le cuesta entrar en calor, intento coger un buen ritmo, pero con la corriente que hay y esas incómodas olas, lo más importante es no desorientarme mucho. Llegamos al punto de giro y me digo “bueno Fer, ahora será algo más fácil con la corriente a favor…” Pues no, se me hace igualmente eterna la vuelta. Por fin salimos del agua, veo el crono y cerca de 37’, bajón porque había estado nadando bastante más rápido.

Transición muy larga, cojo la bicicleta y a remontar e intentar ir lo más rápido posible, sin salirme del guion marcado por mi entrenador @carlosaznar. Primera parte muy técnica saliendo de Samorin, y por fin llegamos a la autovía: aire a favor que te hace volar, llego al primer punto de giro con 41’5 km de media.  Los 20 km hasta llegar hasta el siguiente punto de giro, son una odisea, toca luchar contra el viento, momentos de ir a 30 por hora y muriendo. Me adelantan varios triatletas a ritmos muy altos, intento mantenerlos en la distancia, pero eso hace que me salga de los parámetros marcados,  e inmolarme, la carrera es larga y hay que gestionarlo, toca cuidar mucho la alimentación y la hidratación.

A mitad de carrera, transición rápida, me pongo calcetines, cojo gorra, gafas y geles y a morir corriendo. Las piernas se me van , veo los 3’30 en el reloj y me digo afloja que esto es largo, primer km y voy a 3’37, afloja Fer que sigues yendo muy rápido. Llego al punto donde hay un amigo, y me grita que voy el 12 de mi GGEE, un top ten es la ‘hostia’, y más con el nivelón que hay aquí. La carrera transcurre en la zona del hipódromo, 3 vueltas de 7km cada una, tramos de arena, otros de hierba y otros de asfalto, se hace muy llevadero y “fácil” correr por aquí.

En cada vuelta nos dan tres pulseras: amarilla, verde y azul, en este orden. Yo sigo manteniendo un ritmo algo más alto del marcado, pero mi tripa ya no acepta más geles, me molesta un poco la tripa y me temo que sí fuerzo a comer la puedo liar, así que toca tirar de cabeza, no dejo de coger agua en cada avituallamiento. Vuelvo a pasar por dónde está Juanma, (mi amigo), y esta vez no le oigo decirme en qué puesto voy, da igual toca seguir y no rendirme. En mi cabeza tengo constantemente a todos los amigos y mi familia con sus mensajes de apoyo y ánimo, pero sobretodo a mi padre, que tanto disfrutaba viéndome competir, y que ya no le tengo conmigo. Así que no podía aflojar.

Paso de tercera vuelta , Juanma me canta:  “vas el 8”, y digo venga solo te quedan 7 km y ahora no vale dejarse nada de lo que te queda. Cada vez voy apretando más, km 18 y me tomo un gel, ya me da igual la tripa y todo, en cuestión  de unos minutos esto ha terminado. A falta de 1 km me dicen que ya soy el séptimo, pero que llevo a uno delante, aprieto y aprieto hasta no poder más, llego al punto donde pone ( vuelta o entrada en meta) , Justo ahí adelanto a otro, soy sexto. Un sexto puesto que me sabe a podio, que no se quedó lejos, solo a 3’.

Satisfecho, y orgulloso de mi entrega, por no haberme rendido y conformarme. Había que darlo todo y así lo hice. He pasado un año duro, por el fallecimiento de mi padre y por algunas otras cosas que no vienen al caso, he sabido sobreponerme y luchar cada día porque no hay otra forma, y aquí está mi premio.

Esta carrera va dedicada a todo mi equipo, en especial a Ferdy por haber confiado en mí para formar parte de él.

A mis Sponsors por la ayuda que me brindan y su confianza otro año más,a mis amigos y personas cercanas que cada día me apoyan y mandan mensajes de ánimo. Pero sobretodo a mi familia, que son los que siempre están ahí , y a ti papá que sé que desde allí arriba me has llevado en volandas.

Deja un comentario